Por Miren Lasa
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30 mar, 2022
"La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando”. Me encantan estas palabras de Picasso, son la respuesta perfecta a la pregunta de si la inspiración realmente existe o es un mito. Y es que cuando uno hace de su pasión su trabajo, siempre está trabajando, como nos ocurre a nosotros aquí en Dibujario. Con el paso del tiempo y la práctica se va adquiriendo una habilidad especial para mirar la vida “con ojos de”. Con ojos de dibujante, con ojos de ciencia, con ojos de educador, con ojos de padre… y también, como me ocurre a mi, con ojos de Marketing. De pronto vas por la calle, entras en una tienda, encuentras un nuevo producto y te descubres imaginando cómo y porqué se hacen las cosas de determinada manera. En tu cabeza empiezan a surgir preguntas, que sin duda intentas responder, ideas nuevas. Te adentras en ese juego que atrapa. Al cerebro le encantan este tipo de juegos… tan solo basta una pequeña pista para que se desate todo un proceso de razonamiento lógico, imaginación y creatividad. Dicen que la percepción es algo muy subjetivo. Ante una misma imagen, unos ven una cosa y otros ven otra. Ante una misma historia, cada uno recuerda lo que le resulta más afín. Por tanto la vida, puede mirarse desde miles de millones de perspectivas distintas, una por cada persona que vive en este planeta. Un día iba en mi coche subiendo por la calle Costa Rica en Madrid. El semáforo se pone en rojo. Miro a la derecha y… “¡tachán!”, el destino y un amable desconocido, me regalan esta imagen: